Madrid, 21 oct (PL) El jefe del Gobierno español, Mariano Rajoy, propuso hoy el cese del presidente de Cataluña, Carles Puigdemont, y de todos sus consejeros para restaurar el orden constitucional en esa región que busca separarse de este país europeo.
En una comparecencia en el gubernamental Palacio de La Moncloa, Rajoy anunció que someterá a la decisión del Senado el relevo de la Generalitat (autogobierno catalán), en virtud del artículo 155 de la Constitución de España.
La aplicación de ese precepto constitucional, acordado este sábado por La Moncloa, permite al mandatario intervenir las competencias de una de las 17 comunidades autónomas de esta nación ibérica para obligarla al «cumplimiento forzoso» de la legalidad.
«No se suspende la autonomía ni el autogobierno de Cataluña, se cesa a las personas que han puesto a ese Gobierno fuera de la ley», explicó el también líder del derechista Partido Popular (PP) en una lectura muy peculiar de la activación de ese artículo de la carta magna.
Explicó que el ejercicio de las funciones de los consejeros (ministros autonómicos) se encargará a los órganos y autoridades que cree o designe Madrid, aunque la idea es que las competencias las asuman los ministerios de la administración central.
Rajoy dispuso, además, que la facultad de disolver el parlamento catalán sea del presidente del Gobierno, quien deberá convocar a elecciones anticipadas en un plazo de seis meses.
«Mi voluntad (de celebrar esos comicios regionales) es hacerlo tan pronto como recuperamos la normalidad institucional», enfatizó.
Dentro de las medidas consensuadas para activar el 155 -nunca utilizado en casi cuatro décadas de democracia española-, recomendó también que la cámara autonómica no pueda designar candidatos ni votar la investidura de otro gobernante tras la destitución Puigdemont.
El líder conservador justificó la aplicación del artículo 155 en Cataluña a lo que calificó de desobediencia rebelde, sistemática y consciente de los pronunciamientos de la Justicia por parte de las autoridades de ese territorio de 7,5 millones de habitantes.
«Volver a la legalidad, recuperar la normalidad y la convivencia, continuar con la recuperación económica y celebrar elecciones» son los objetivos de esta intervención, subrayó, luego de acusar a la Generalitat de buscar el enfrentamiento con sus acciones unilaterales.
Según su criterio, lo único que hizo Puigdemont fue liquidar la ley y poner en marcha, sin tener facultades, «una legalidad paralela».
Las resoluciones aprobadas este sábado por Rajoy serán remitidas al Senado, que las avalará el 27 de octubre gracias a la mayoría absoluta del PP en la Cámara alta.